Para mí no existe nada mejor en el mundo; tocar la batería y hacer música con colegas. ¿Pero cuando lo que más te gusta te provoca dolor, puede convertirse en una pesadilla? A mi no me va a pasar… o eso pensaba yo. No te preocupes porque no voy a agobiarte con mi historia. Desde hace un tiempo, veo en redes sociales publicaciones de otros bateristas comentando y preguntando por consejos acerca dolores que sufren, por eso en este artículo voy a compartir algunas herramientas que me ayudaron a no volverme loco en ese periodo de mi vida.
Si eres un Baterista que sufre dolores mientras tocas, y no tienes ni idea por donde empezar a gestionarlo espero que este contenido pueda ayudarte y orientarte.

Antes de empezar existe una idea básica a tener clarísima. Hay una gran diferencia entre esforzarte y sufrir.
El dolor NO MOLA!, sentir dolor no significa ni que te estás esforzando ni que vas por buen camino… eso de: sigue ahí duro, aguanta… si duele es que te lo estás currando… ES UNA AUTÉNTICA TONTERÍA.
Una cosa es esforzarte y la otra es sufrir. Sinceramente, sangrar a lo whiplash es algo que no considero muy saludable en plena era de lo Healthy.
Aprender es crecer, evolucionar, cultivarse… aprender no es una pelea de Gladiadores. En demasiadas ocasiones nuestra sociedad plantea erróneamente el sufrimiento como algo positivo. Esfuérzate en ser mejor, pero ¿debes sufrir en el proceso de ser mejor?
La máxima debe ser; ¡SI SUFRES Y TE DUELE PARA! ¿Cuando pones la mano sobre una vela y te quemas apartas la mano verdad?… ¡pues lo mismo!
A partir de aquí, te propongo las siguientes ideas que te ayudarán a conseguir la actitud necesaria para afrontarlo
- Perdonate. Ni te mereces el dolor ni eres peor baterista por tenerlo. Cuando estás en una situación como esta, es mejor pensar que el dolor o una lesión es algo que puede ocurrir, forma parte del juego. Con tiempo y un tratamiento adecuado se tiende a arreglar. Lo que es seguro es que si estas en esta situación, vas a empezar un proceso de aprendizaje que de otro modo seguro no experimentarías.
2. Ocúpate de él. El dolor es como un niño pequeño que no para de llamar tu atención y acaba invadiendo por completo tu mente. Si tocas con dolor, este siempre acabará ganando sobre la idea musical. Lo mejor que puedes hacer es ocuparte de él. En el momento que sientas que un dolor es persistente o repetitivo ha llegado el gran momento de meterse en el asunto. Deja de PRE-ocuparte y pasa a Ocuparte
3. Mételo en tu Plan de estudio (parte 1, análisis). Al sentir dolor al tocar, entras en el mundo del aprendizaje desde el lado oscuro; aprender lo que NO debes hacer también es aprender. Hay dos maneras de aprender; desde lo correcto y desde lo incorrecto.
No hay nada más subjetivo que el dolor, y no hay nada más interesante para crecer que trabajar en tus propias vivencias… el dolor puede ser una puerta para empezar a trabajar en ti mismo. Así que empieza por observarte; ayúdate de espejos o cámaras para grabarte y responde a estas preguntas:
-¿Dónde te duele?
-¿Cuánto tiempo tarda en aparecer el dolor desde el momento que empiezas a tocar? Cronométralo
-¿Qué acción haces cuando te empieza a doler?
-¿Siempre te duele haciendo lo mismo?
-¿Siempre en la Batería? ¿o también en el pad o el ordenador?
-Si desaparece ¿cuánto tarda en desaparecer el dolor después de parar la actividad?
-¿Puedes hacer otra cosa mientras descansas? Por ejemplo, si te duele la muñeca, ¿puedes seguir trabajando la coordinación en los pies?
Apunta tus respuestas, conclusiones y cualquier idea que consideres relevante y actúa en consecuencia.

4. Aprende con quien tratas. Es importante entender de que va esto del dolor. Lo primero que te recomiendan en el momento de sufrir cualquier patología es: ¡¡¡¡NO LO BUSQUES EN GOOGLE!!!!! ….
Pero claro, somos humanos y por lo tanto lo primero que haces es meterte en Google… Obvio…Intentaré ahorrarte unos pasos: Creo que la primera pregunta a responder debería ser, ¿Que es el dolor?
La Asociación Internacional para el Estudio del Dolor definió el dolor como …“una experiencia sensitiva y emocional desagradable, asociada a una lesión tisular real o potencial” … ¿Y que significa esto? Que puedes sentir dolor aunque no haya una causa física para que aparezca, ¿alucinante verdad?
No te voy a comer la cabeza con esto, pero voy a compartir contigo un enlace muy interesante, donde del Dr. Jaume Llobet, director de l’Institut de l’Art explica de un modo muy claro como funciona el cerebro y el dolor.
5. Busca ayuda profesional, un buen diagnóstico es clave. Quiroprácticos, Traumatólogos, Quiromasajistas, Osteópatas, Fisioterapeutas, Acupuntores… ¿Dónde voy?
Mi consejo es empezar por un buen Fisioterapeuta, busca referencias a tu alrededor porque seguro que muchos de tus conocidos conocen buenos profesionales de la salud en tu zona.
No quiero engañarte, hay muchas posibilidades de que tu bolsillo se resienta… y quizá durante un tiempo tu nueva Black Panther deba esperar. La idea es que el dolor mejore, por lo tanto no te dé pereza pagar por los servicios de un buen profesional. Llegar a un buen diagnóstico lo antes posible es SUPERIMPORTANTE, te ahorrará tiempo y dinero.
Además, si has hecho caso del punto 3 y vas con las ideas claras, podrás explicar donde, cuando, cuanto, y como se comporta tu dolor y vas a ayudar al profesional en el diagnóstico.
6. ¿Que es lo que me pasa? Existen pocos estudios exhaustivos acerca de las dolencias más comunes en los bateristas y todos coinciden en que las dolencias más habituales para los bateristas están relacionadas o con la parte postural o con la parte de la repetición continua de movimientos.
Quiero compartir aquí uno de los que creo importantes, el que realizó la Dra. Nadia Azar sobre 831 bateristas para descubrir qué lesiones son las más frecuentes. La Dra. Azar es profesora asociada al departamento de Kinesiología de la Universidad de Windsor, creadora de The drummer lab y colaboradora habitual de drumeo. Aquí te dejo el enlace directo a su estudio, también puedes encontrar algunos de sus artículos en el apartado Health de la web de drumeo.
Con toda esta información en la mano y dependiendo del diagnóstico, es muy probable que en algún momento tengas que parar de usar la zona afectada o reeducar la parte motriz. ¿Significa eso que te vas a dique seco algún tiempo? ¡¡¡Ni por asomo!!!!
La parte mental es esencial en la gestión del dolor y tener un buen estado de animo es indispensable para que te recuperes lo antes posible, así que depende cual sea tu problema, podrás trazar distintas estrategias para seguir implicado en tu evolución en el instrumento. ¡Por eso es muy importante generar un plan de acción!

7. El plan de acción. Un plan de estudio habitual de batería trabaja distintas áreas: Coordinación, técnica de manos, lectura, estilos… Ahora es el momento de añadir una asignatura nueva; tu recuperación.
7.1. Es probable que tu recuperación incluya sesiones de fisioterapia, o momentos de reeducación postural, por lo tanto es muy importante que consideres este tipo de acciones como parte de tu evolución como baterista. ¡Estás evolucionando!
7.2. Puede ser una buena idea buscar a alguien que te ayude a trabajar la parte corporal en la batería. Es tan importante trabajar la lesión como aquello que la produce. Tenemos la suerte que el interés sobre el tema ha crecido en los últimos años y existen libros y vídeos acerca del tema. Pero lo que te aconsejo es buscar a un profesor de batería con conocimientos o interés en ergonomía para personalizar y ajustar el trabajo acorde con el diagnóstico de tu profesional de la salud.
7.3. Habrá momentos en que tu cuerpo necesite reposo, úsalos para trabajar en conceptos como el análisis de estilos y bateristas interesantes, transcribir temas, trabajar la lectura a vista…
No todo el desarrollo del baterista se sitúa detrás de la batería.
7.4. Si tu patología es postural, quizá puedes seguir trabajando tus manos estando de pie situando un pad o la caja mucho más elevada. Si necesitas descansar manos o muñecas, plantea un trabajo de pies y equilibrio…
7.5. Escribe y estructúralo todo, plantea tus sesiones de trabajo para que respeten los tiempos de descanso que tu cuerpo necesita. Por ejemplo: Si sabes que tu mano se carga a los 10 minutos de trabajo, toca solo 7, no apures y gestiona el tiempo de trabajo respetando tiempos de descanso físico.
Tener este plan de acción, ayudará a que no dejes de sentirte músico, verás evolución. La sensación mental de recompensa y desarrollo es muy importante, tu estado de ánimo mejorará y eso ayudará a la mejora de tu lesión.
Por eso estoy encantado de poder añadir a esta sección humana el punto de vista de Marc Borrego, baterista y psicoterapeuta. Que analizará al baterista, ¡desde la Azotea!
Recuerdo el dolor como algo muy limitante y frustrante, durante un largo periodo de tiempo solo fui capaz de tocar seguidos sin dolor 30 minutos…
Con el paso de los años me he dado cuenta que sentir dolor ha sido de las experiencias que más me ha enseñado en la vida y en la batería.
Sin ese dolor no sería ni la persona ni el músico que soy. No habría desarrollado mi método Body&Drums ni hubiera escrito mi libro Primero el Batería. Sigo aprendiendo cada día de los errores, te aseguro que aprendes más de los errores que de los aciertos, sólo necesitas darte cuenta de porqué se produce el error para empezar a solucionarlo.
No te desanimes, porque no hay nada que no vuelva tan humanos como el dolor… Porque recuerda siempre que somos humanos…
Pepo Busquets. Body and Drums